Girasol hambriento

La obra presenta una forma semicircular y abstracta que capta la atención del espectador con su singularidad y poderosa imagen. En su contorno, lo que parecen ser dientes afilados se proyectan, sugiriendo una naturaleza voraz y una insaciable curiosidad. Estos elementos aportan una connotación de deseo, como si la figura anhelara atraparlo todo a su alrededor.

Las dos delgadas piernas que cuelgan, similares a frágiles hilos, contrastan con la robustez de la parte superior, creando una tensión visual que invita a la introspección. Esta dualidad entre fuerza y fragilidad resuena con la experiencia humana, simbolizando momentos de lucha y vulnerabilidad.

En el centro, lo que parecen ser ojos añaden una dimensión de profundidad a la pieza, transmitiendo una mirada que implora atención y comprensión. Juntos, el conjunto evoca la imagen de un girasol hambriento, ansioso por absorber lo que necesita para crecer y florecer. Este simbolismo sugiere una búsqueda constante de nutrientes emocionales y experiencias significativas en un mundo a menudo indiferente.

La elección del negro como único color intensifica el impacto visual, invitando a la reflexión y a un diálogo más profundo sobre la naturaleza del deseo y la conexión. Esta pieza no solo desafía las percepciones estéticas, sino que también fomenta una conversación sobre las luchas internas y la búsqueda de significado en la vida.

Detalle de la obra
Tinta sobre papel 
8 1/2 × 11 in | 21.6 × 27.9 cm
Obra Única
Incluye Certificado de Autenticidad